La Obesidad Intantil También un Problema de los Padres
Todos los padres en algún momento aquí y allá han tenido la preocupación de que le han fallado a sus hijos.
Si usted es una mamá o papá, usted sabe a lo que me refiero. Usted se preocupa que no está pasando suficiente tiempo con su bebé, no leyéndole lo suficiente a su niño, no jugando lo suficiente con ellos, no estar allí, y así por el estilo. Por el resto de nuestras vidas, en cierta forma, la preocupación nunca termina.
Pero hay una estadística que no miente – una que muestra un área donde muchos padres realmente le están fallando a sus hijos. Estoy hablando acerca de la obesidad infantil.
Septiembre es el Mes Nacional de Obesidad Infantil- y con buena razón. De acuerdo con el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), uno de cada cinco niños en América está obeso, y con ese hecho vienen nada más que problemas para los niños.
Los niños obesos son burlados en la escuela. Hoy en día los niños que están obesos son más propensos a convertirse en adultos obesos, llevándolos a una vida con problemas de salud físicos y mentales incluyendo diabetes. Ellos estarán en riesgo incrementado de ciertos tipos de cáncer. Es un problema de la salud pública que no puede ser ignorado.
El Departamento de Salud de Nuevo México (NMDOH) ha estado combatiendo este probema por años, y ha visto algunos cambios positivos para los niños en nuestro estado. La tasa de obesidad infantil en los estudiantes de tercer grado de Nuevo México continúa en descenso, con una disminución del 20 por ciento desde 2010. También, por primera vez desde que el Departamento comenzó a reunir información del Índice de Masa Corporal (BMI) en 2010, las tasas de predominio de obesidad en los estudiantes de kindergarten es menor que en 2010, yendo de 13.2 por ciento a 11.6 por ciento en 2014. Hablando de cambios para mejorar.
Los padres también pueden hacer su parte en promover cambios para mejorarse. Aquí algunos consejos:
- Para mantener el peso saludable de los niños, el balance de energía es importante. Para obtener y mantener este balance, los padres deben asegurarse que los niños obtienen descanso adecuado, siguen recomendaciones en cuanto al tiempo con aparatos electrónicos (no más de dos horas al día), toman parte en actividad física regularmente, y comen la cantidad correcta de calorías.
- Los padres pueden sustituir alimentos altamente nutritivos y bajos en calorías tales como frutas y vegetales en lugar de alimentos con ingredientes altos en calorías, tales como azúcares añadidas y grasas sólidas.
- Los padres pueden servirle a los niños frutas y vegetales en las comidas y como meriendas.
- Los padres se pueden asegurar que haya agua accesible como alternativa sin calorías en vez de bebidas endulzadas con azúcar.
- Los padres pueden ayudar a sus niños a obtener la cantidad diaria recomendada de actividad física (una hora diaria) animando a sus niños a participar en actividades que son apropiadas y divertidas para su edad.
El programa Healthy Kids Healthy Communities del NMDOH ofrece maravillosas ideas para ayudar a las familias a mantenerse en forma, incluyendo su HKNM 5-2-1-0 Challenge. Aprenda más visitando Healthy Kids Healthy Communities.
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